Tierra mojada (Poesía)



En un gran ojo azul,
en un pedazo de tierra
amanece mojado.
Miles de lágrimas
hacen un concierto de trance.
Las plantas, los árboles,
el calor y la inspiración
lo agradecen.

Huele a tierra mojada, dicen
y aún así corren de un lado a otro.

Algunos pájaros ceden su concierto,
otros son fieles al ritual y cantan
desentonados.

Nebulosas estelares se apropian
de ramas, brazos, piernas, patas
cabezas, calles, pulmones,
ideas, traiciones, amores,
sexos, avenidas, casas, edificios...

Y yo, placido, oigo la agradable música
entre los motores y los engranes,
que rechinan desde las jaulas
productivas e interactivas, de nuestro
pedacito de tierra empapada.

Suicidio (Poesía)

Suicidio

Todo está contaminado,
contaminado el aire,
el agua, la tierra
los mares, los bosques,
las selvas, tu pensamiento
tu mirada, tus sueños
la ansiedad, la depresión.

Todo está muy contaminado
tus esperanzas...
La política, los piropos
las escuelas, los cines
los movimientos,
las sociedades, la comida
la tristeza en tu mirada,
la mercadotecnia
la música, la noche
el vacío, el éxito
las utopías
incluso mirar una noche estrellada.

Todo está corrupto y contaminado
El trabajo, mirarte...
el suicidio, la vida, los excesos
los libros, la mañana.

Todo está lleno de mugre y porquería
La tele, los deportes
la radio, las series
la películas, la izquierda
la derecha, las feministas
los feministas, las naranjas
la tecnología, hasta la idiotez
las ideologías, el circo
tus lagrimas...

Por eso quiero suicidarme entre tus piernas
suicidarme muchas veces
en lo más profundo de ti, de tu boca
desaparecer sobre tu cuerpo
en tus indómitas aguas, tormentas
ciclones, hoyos negros
desaparecer y renacer
ser niño otra vez.

Cero complicaciones (Poesía).

Cero complicaciones.



Vuelvo a la rutina con esta armadura.
Tu sonrisa divina, tu amor espontáneo, mi motor.
Embriagando mi río en gotas de trabajo que no remuneran.
Guerra sucia, marionetas por todas partes.
Todo contaminan, hasta los sueños más transparentes y profundos.
Tan sencillo ser feliz, sólo subirse al techo de una casa
y mirar como mi amor se funde en tu piel, solo eso, sin embrollos. 

De la cascada de energía (poesía)

De la cascada de energía,

 del tsunami de energía. En el mar de energía, mi voz vapor. Presas, diques se desvanecen. Sol, estrellas, egos gigantes se desvanecen. Memorias, luces, sonidos, días, sueños que se diluyen. Apareces como ola salvaje y efímera y en fotos inútiles trato de conservarte, atarte, amarte. Herido y cansado del pasado, un barco en picada, un bosque incendiado, un eco olvidado, un dolor que alucino es el mismo. Fluye, dicen. Vuela, me digo, mira el sueño desde la luna, mira el ruido, cascadas, olas, ríos, sangre, tormentas, ciclones, amaneceres y atardeceres, todo y nada, hacia el mar, en el mar.

La tentación de San Antonio, 1946 de Leonora Carrington